viernes, 27 de mayo de 2011

Yo una asesina



Esos fueron los años  más difíciles en 40 años, fue cuando  decidió no ir mas al trabajo, dormir hasta tarde, no comer ni tomar liquido alguno, solo fumaba el cigarrillo más barato, la depresión en la que se hundió miles de veces esta vez fue fulmínante. Cuando despertaba se pasaba horas fumando a la luz del día hasta que caía sumido en sus crueles recuerdos que aun le dolían  amargándole la boca y le causaban esas nauseas de joven. Se dejo crecer la barba se pudrió en su porquería  se durmió sobre ella, vivió sin vida los peores meses, los peores días, las peores horas con los mas innecesarios minutos.

Murió después de consumir marihuana, con los brazos destrozados por los cortes, según él para litigar  el dolor que le carcomía el alma, con marcas indescifrables en la pared, murió cansado de vivir sin aliento para un segundo más; pobre mi hermano, no me imagine capaz de disparar esa arma ni mucho menos con dirección  a su cansado corazón. El me lo pidió como un favor especial, el último; yo solo quería ayudarlo. Ahora nadie sabe que está muerto solo yo y no sé qué hacer con el arma ni con el cuerpo, estoy desesperada con el corazón a punto de salir de mi tórax un nudo insoluble en la garganta las manos temblorosas y quiero Salir corriendo de este cuarto oscuro, pero no quiero dejarlo solo tirado en el piso y bañado en su propia sangre.


Escrito por : "Ipeck".

3 comentarios:

  1. Me gusta la figura y la escena...hay una descripciòn variable...es un gusto que hayas escrito Ipeck...

    Atte:
    El Marquès de Solaligue

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  2. Parece que ya tienes una trama me gustaria seguir leyendo mas de ti, ojala que termines de subir fragmentos de esta novela hasta completarla.

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  3. bueno muñeca como ya te dije , tu eres com0 la luna llena que opaca a las estrellas cuando sale a flotar al cielo , sigue con la pluma te hará inolvidable..prefetizo un futuro muy bueno para ti ...

    por: andaluz rosas negras

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